Tenerife

Rescatando del olvido viejos cultivos en los riscos de Anaga

El aislamiento y la complejidad del relieve de Anaga han agudizado el ingenio de los moradores de este rincón de Tenerife. Cualidades que los han hecho superar los increíbles desniveles que surcan las cumbres de Anaga. Un sistema de terrazas y transporte de cultivos y agua que desafían la gravedad.

En un pasado cercano el silencio del entorno era interrumpido únicamente por el golpe de los batanes trabajando el lino y por los ecos producidos por los aperos de labranza empleados en el cultivo de una tierra destacada por su singular agrodiversidad.

Los Batanes son, en el presente, un regalo para la vista, el paladar y olfato y, en el futuro, nos brindan la oportunidad de aprovechar el conocimiento y el ejemplo de nuestros mayores para enfrentar los retos venideros.