Ruta de la Memoria del Paisaje / Fuerteventura

Pájara es el municipio en extensión más grande de Canarias. Su situación en el extremo Sur de Fuerteventura, le ha generado una latitud propia a sus paisajes. Esta situación de proximidad al continente africano, la convierten en ejemplo de adaptación a las condiciones de un territorio marcado por la aridez, en la que la población a través de los siglos, ha sabido adaptarse a unas condiciones generadoras de una ecología cultural cargada de enseñanzas y valores.

El esfuerzo de generaciones se traduce en una forma de entendimiento con el territorio que ha buscado alianzas y conciertos con sus recursos, en especial con la ganadería, con la agricultura y con la pesca. Una trilogía económica, ecológica y cultural, que vamos a conocer a través de la palabra y la memoria de sus protagonistas. Los mayores de Pájara nos van a descubrir las claves que nos permiten entender la Memoria de un Paisaje.

Este granero de saberes ha seleccionado un conjunto de bienes, que hoy forma parte del patrimonio local, y que conoceremos en un recorrido a través del “barranco de Mézquez”: unas antiguas tenerías, una mina, un molino, un horno de cal junto a un antiguo caserío, probablemente primer asentamiento del pueblo de Pájara… En el camino y en la palabra se nos muestran aspectos transversales al conocimiento del entorno como son las plantas y sus usos, elementos de captación y aprovechamiento del agua como una fuente, un pozo, un molino de agua y un aljibe, así como estructuras asociadas a la agricultura, como gavias, nateros y cadenas. Ya en el casco antiguo del pueblo conoceremos el funcionamiento de una noria, y finalizaremos haciendo un buen gofio en la tahona.

Conocer la historia de estos bienes nos permite proyectar el conocimiento a través de la palabra de los mayores, para poder entender el modelado del paisaje, que da identidad propia al territorio y a la comunidad que lo generó y a la que lo sostiene.

Las tenerías

Antiguamente en años ruines o períodos prolongados de fuerte sequía se procedía al sacrificio de los animales para el aprovechamiento del cuero, el cual se llevaba a las tenerías para curtirlo y obtener cordobán. La industria del cuero es una actividad muy antigua, que usa como matería prima las pieles obtenidas como sub-producto del aprovechamiento cárnico para el consumo humano. Esta industria transforma la piel de un animal en cuero, que posteriormente se emplea para la fabricación de diversos artículos.

La transformación industrial de la piel en cuero o cordobán exige la existencia de infraestructuras técnicas y conocimientos, así como determinados recursos naturales que juegan un papel importante en la cadena operativa de producción.

La tahona

En la economía de la historia moderna de Pájara destacan las actividades y derivados de la ganadería y la exportación de orchilla, a través de muchos puertos y abrigos naturales y a los que más tarde se sumó la explotación de la cal, de la que quedan importantes vestigios en la costa de Ajuy. Por su singularidad y por formar parte de la ruta, sobresalen también las actividades relacionadas con la industria de la piel, que llega hasta nosotros a través de la memoria de los mayores que conocieron el proceso y de las tenerías incluidas en el recorrido.

Esta actividad queda reflejada en los textos históricos como los de Escolar y Serrano y su “Diccionario Estadístico de las Islas Canarias 1793-1806” que recoge para estas fechas, de cambio de centuria, la existencia de dos tenerías en el municipio.